Mejores lecturas de 2012

Estas son las lecturas que, por diferentes motivos, mejor recuerdo han dejado en mi memoria y me han hecho pasar los momentos más gratos mientras leía.

El primer naufragio, Pedro J. Ramírez

Es un análisis en profundidad de treinta acontecimientos transcendentales de la Revolución Francesa. El autor nos aporta una cantidad ingente de documentación, abundante bibliografía -por si queremos ahondar más en cada acontecimiento- y nos relaciona unos acontecimientos con otros.

Aunque su lectura puede resultar un poco compleja, el resultado en magnífico porque acabamos teniendo una idea global de lo que fuen la primera revolución e incluso nos ayuda a entender muchos hechos históricos posteriores que llegan hasta casi nuestros días. El lenguaje es sencillo y no se necesita ser un erudito en el tema para comprender y disfrutar este libro.

Todo Marlowe, Raymond Chandler

Este libro llego a mi estantería por mi cumpleaños. Lo he leído alternando con la lectura de otros títulos, ya que son nueve novelas cuyo protagonista es el detective privado Philip Marlowe. Tres de ellas las he vuelto a leer, pero he disfrutado de todas. Hay que destacar las metáforas empleadas, creo que son insuperables, se podrán igualar pero no superar. Las descripciones de lugares, situaciones y personas simplemente de chapeau. En los casos en los que trabaja no nos da a conocer de antemano ninguna pista de como se resolverá el caso y yo por lo menos no he sabido anticipar el final de ninguna de las historias. Lo resuelve de una manera tan sencilla y lógica que nos sorprenderá. Simplemente imprescindible.

 Las voces de Pamano, Jaume Cabré

Es una novela que trata sobre la Guerra Civil española. Cayó en mis manos y yo la miraba con desconfianza porque resulta difícil encontrar novelas que cuenten una historia de personas y esta lo es.

A partir de una carta que una maestra encuentra oculta detrás de una pizarra, se desarrolla una historia de maquis, falangistas y héroes anónimos mezclada con las vivencias de Tina, la maestra. Se desarrolla en varias tramas que se entrecruzan, mostrando una fotografía en ocasiones despiada y siempre lúcida de la sociedad española desde la posguerra hasta nuestros días. Una obra que primero me sorprendió y luego me cautivó.

Un buen sitio para reposar, Luis García Maluenda

Esta novela la tengo reseñada y si os interesa podéis leerla -la reseña- aquí. Como ya conté en la reseña, el autor la puso al nivel de las de Raymond Chandler. Me siento afortunado por descubrir a este autor, que si sigue escribiendo así me contará como seguidor incondicional.

La diferencia que veo con Chandler es que no se entretiene tanto en descripciones de lugares, situaciones y personas, es más concreto pero la fotografía de lo que quiere describir queda perfectamente nítida. Por lo demás, para mi gusto, perfectamente equiparables. Me resultan más sugerentes los ambientes de nuestro amigo Atila.

El tiempo que querría, Fabio Volo

Me regalaron de este autor las dos novelas que estaban en las librerías en ese momento, ésta y La primera luz de la mañana, que leí primero y no me gustó nada, por lo que ésta la empecé a leer con muchas reservas. Resultó ser el polo opuesto.

Un relato que destila emociones y sentimientos profundos, que en ocasiones resulta conmovedora. Creo que la principal moraleja que saque de este libro es que en algún momento nos hemos dado cuenta o nos daremos cuenta del tiempo que desperdiciamos en asuntos y luchas sin importancia. Y que en algún momento de nuestra vida nos faltará "el tiempo que querriamos" para hacer las cosas bien y ocuparnos de lo que realmente importa. Una buena lectura para recapacitar sobre nosotros mismos sin ser un libro de autoayuda.

India mon amour, Dominique Lapierre

Este libro lo compré en la Feria del Libro de Madrid, con dedicatoria del autor incluida. Los motivos de su adquisición, pues que Dominique Lapierre he leído casi todo y todo lo que he leído me ha encantado. Las novelas a duo con Larry Collins y sus libros sobre la India, Mil soles  y La ciudad de la alegría.

Aunque vuelve a escribir sobre la India, a mi me ha vuelto a emocionar. Me ha fascinado con un mundo tan diferente al que estoy habituado, tan exótico, tan duro, tan difícil para la vida. Pero donde la mayoría de la gente, eso es lo que nos transmite Dominique Lapierre, conserva una alegría por la vida que para nosotros es inexplicable. Me ha despertado una admiranción infinita por tanta gente, que olvidandose de sus comodidades occidentales, se van a la India a luchar por los más necesitados. En este caso hablo de la India, pero quiero extender mi admiración  por todos los  que  en el mundo se dedican a cualquier trabajo en favor de los más necesitados y con eso se sienten recompensados.

Betibú, Claudia Piñeiro

Esta es otra de las novelas que tiene reseña y que podréis leer pinchando aquí.

De Claudia Piñeiro no conocía ninguna obra y me decidí por ésta, como ya he comentado, por que Alfaguara nos trae unos autores que son un poco peculiares escribiendo.

En este caso, quizá, la única peculiaridad sea el lenguaje, el español con sus variantes argentinas y nuevas acepciones, que le da un matiz diferente a lo que estamos acostumbrados. Pero me resultó una novela con una historia muy bien armada, con un desarrollo claro y esto no todas las veces los autores lo consiguen en una novela policiaca y un final sorprendente.

Solo en Berlín, Hans Fallada

Un relato que nos da una visión de la gente que luchó contra Hitler desde dentro de la propia Alemania. Quizá un tema poco tratado, tanto en la literatura como en el cine. Los alemanes que se opusieron a ese régimen dictatorial y genocida.

La cruzada propagandística que emprende Otto Quangel contra el régimen nazi resulta apasionante, en ocasiones claustrofóbica. Nos mantiene durante toda la novela en la tensión agobiante que supone estar perseguido por unas fuerzas implacables.

En la siguiente entrada hablaremos de lo que menos me ha gustado en el año. Espero que os interese los que aparecen en esta entrada.

Enzo desde Liberty Café