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jueves, 12 de diciembre de 2013

Reseña Solo los inocentes, Rachel Abbot

Título: Solo los inocentes
Autor: Rachel Abbott
ISBN: 978-84-15532-95-8
Editorial: Maeva
Género: Novela negra
Páginas: 477
Precio: 17,90 €

El multimillonario y filántropo Hugo Fletcher aparece brutalmente asesinado en su lujosa casa de Oxfordshire. Tras las primeras investigaciones, no queda lugar a dudas de que el asesino es una mujer. Se hace cargo del caso el detective Tom Douglas, y comienza a adentrarse en el lado oscuro de la personalidad, aparentemente intachable, de la víctima. Pronto se da cuenta de que todas las mujeres con las que se relacionaba ocultan algún secreto: desde Laura, su segunda esposa, hasta Alex, su hija adolescente, o Jessica, su secretaria, todas se refugian en evasivas y mentiras acerca de la Fundación Allium y la vida personal de la víctima. Cuando por fin sale a la luz la terrible verdad que se esconde tras las obras benéficas de Hugo Fletcher, Tom se enfrentará al terrible dilema de si castigar a los culpables o proteger a los inocentes.

Reseña

Comienza esta novela con la aparición de un cadáver en unas circunstancias muy extrañas y muy comprometidas. Lo encuentra la empleada del hogar que tiene contratada la víctima, a primera hora de la mañana. El cadáver es el de Hugo Fletcher, multimillonario que tiene una organización para ayudar a mujeres a salir de la prostitución; un hombre socialmente muy respetado y muy bien considerado por su labor filantrópica.

El inspector jefe Tom Douglas se hace cargo de la investigación general y cuenta con la inestimable ayuda de la sargento Becky Robinson. Se abren dos líneas diferentes de investigación. Una estará dirigida a algunas de las mujeres que la organización de Fletcher había acogido y que habían desaparecido y otra se dirigirá a comprobar que Laura Kennedy Fletcher, la esposa de Hugo, se encontraba realmente en Italia en el momento del asesinato.

La narración tiene tres líneas argumentales. Una la investigación de asesinato propiamente dicha, otra desarrollada de forma epistolar que recoge un conjunto de cartas que desde diez años atrás Laura Fletcher le dirigía y no le enviaba a su amiga de la infancia Imoges Kennedy, exesposa del hermano de Laura y una tercera en la que conocemos a una mujer que se encuentra secuestrada, aunque ninguno de los personajes sabe de su existencia y secuestro. Este secuestro me ha parecido un añadido a las líneas argumentales principales simplemente para crear más tensión narrativa pero no me ha parecido que esta parte del relato haga más interesante la novela.

Tras el asesinato de Hugo, Imoges va a visitar a Laura, después de muchos años de no tener contacto entre ellas. En este reencuentro Laura le entrega a Imoges todas las cartas que en esos años le había escrito y no le había enviado. Imoges va leyendo las misivas por orden de fechas, esta lectura le lleva varios días. De esta forma vamos conociendo el desarrollo de la investigación del asesinato de Hugo Fletcher y a la vez la historia de Laura desde que se casó con Hugo. Estas dos líneas argumentales están perfectamente engarzadas de tal manera que vamos conociendo al verdadero Hugo según avanza la investigación del crimen y también vamos descubriendo al Hugo que enamoró a Laura y la relación de ambos en esos diez años de matrimonio.

Con una prosa sencilla y correcta Rachel Abbott nos va llevando por una historia que no resulta trepidante pero si muy adictiva. Nos va descubriendo la doble trama, la investigación y descubrimiento del asesino o asesinos de Hugo Fletcher y la verdadera personalidad de la víctima.

No es una narración en la que el argumento tenga diferentes giros que nos van llevando a equívocos en nuestras conjeturas. Es un relato que transcurre directo por la investigación pero donde las claves que nos descubrirán el desenlace están perfectamente disimuladas e irán apareciendo en su momento justo, compaginando con la lectura de las cartas de Laura por parte de Imoges, para completar el cuadro de la novela.

El final llega con su “tempo” justo, con un resultando sorprendente ya que las novelas de este género no suelen finalizar de la forma que lo hace esta. Es un final que se puede intuir pero que nos pasamos toda la lectura negándonos lo que intuimos. Queda terminada de una manera lógica y bien pensada con lo que consigue, la autora, dar credibilidad y verosimilitud al argumento.

Los personajes están muy bien desarrollados y el ambiente creado por Rachel Abbott nos acerca bastante a los recreados por Agatha Christie o P.D. James, trasladados a la actualidad con ese toque típicamente inglés que a mí, personalmente, tanto me gusta.



 Enzo desde Liberty Café