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lunes, 29 de octubre de 2012

Reseña Betibú, Claudia Piñeiro

Título: Betibú
Autor: Claudia Piñeiro
ISBN: 978-84-204-1041-8
Editorial: Alfaguara
Género: Novela policíaca
Páginas: 345
Precio: 18,50 €

Cuando parece que la tranquilidad ha vuelto a reinar en el country La Maravillosa, Pedro Chazarreta aparece degollado, sentado en su sillón favorito, con una botella de whisky vacía a un costado y un cuchillo ensangrentado en la mano. Todo hace suponer que se trata de un suicidio. Pero pronto aparecen las dudas. ¿Acaso algún justiciero habrá querido vengar la muerte de la mujer del empresario, asesinada tres años antes en esa misma casa? ¿Será ésta la última muerte?El Tribuno, uno de los diarios más importantes del país, deja de lado por unos días su enfrentamiento con el gobierno para cubrir a fondo la noticia. Al escenario del crimen envía a Nurit Iscar, unaescritora retirada, y a un periodista joven e inexperto. Y aunque el antiguo jefe de la sección Policiales, Jaime Brena, ha sido desplazado por sacar los pies del plato, decide involucrarse en el caso y ayudar a su reemplazante y a Nurit, a quien admira en secreto.Una novela atrapante en la que la autora de Las viudas de los jueves vuelve a desplegar todo su talento narrativo para contar la investigación de un crimen y trazar un retrato de su país. Lectora aguda de la realidad y de los comportamientos sociales, Piñeiro echa luz sobre las relaciones entre el periodismo y el poder y sobre los cambios que se han producido en los medios de comunicación, y nos enfrenta a un mundo de límites y controles en el que, a pesar de todo, siempre existe la posibilidad de tender puentes y apostar de nuevo.

Reseña

No había tenido ocasión de leer nada de Claudia Piñeiro, desconocía su forma de escribir, su lenguaje su forma de armar las historias. No se muy bien porque me decidí por esta novela, supongo que por ser una novela policiaca, ya que me gustan mucho aunque hay verdaderos tostones y hay riesgos de patinar con la elección. Este no es el caso, esta novela es un acierto seguro.

La autora no solo nos cuenta la investigación de un asesinato disfrazado de suicidio, también nos hace un retrato magnífico de la Argentina actual. La forma de vida, la política y la sociedad. Nos ayuda a saber más sobre ese país que tengo la impresión nos resulta desconocido aunque aparentemente recibimos bastantes noticias de allí.

La investigación del asesinato de Chazarreta se realiza en tres frentes. Uno desde la redacción del periódico EL TRIBUNO, donde se unen Nurit Iscar, una escritora retirada, un joven periodista recién incorporado a la plantilla, el pibe de Policíales y Jaime Brena, antiguo jefe de la misma sección que es como se llama a la sección de sucesos. El segundo frente lo conforma, lógicamente, la policía y el tercer frente corresponde al diario que es la máxima competencia de EL TRIBUNO. Cada frente va haciendo una parte de los descubrimientos en la investigación aprovechando unos el trabajo de los otros. Con estos tres frentes abiertos la autora consigue mantener el interés siempre muy alto, ya que estamos, página tras página, esperando a ver quien resuelve el caso. Consiguiendo, en ocasiones, un relato trepidante.

He nombrado a estos tres personajes quizá porque tienen algo más de relevancia en la historia, pero lo cierto es que hay algunos más, que también son importantes para el desarrollo del argumento y todos, los nombrados y los que no, tienen una historia anterior que merece ser conocida y que se mezcla con las situaciones actuales.

El vocabulario que utiliza la autora es el argentino o el español con sus variaciones argentinas. Esto, para mi gusto, le da un toque exótico sacándonos de lo que estamos habituados y nos enseña nuevas acepciones de las palabras y giros idiomáticos ayudando a que la lectura sea más amena.

El comienzo del relato es tan bueno y tan absorbente que pensé en si Claudia Piñeiro conseguiría que me mantuviera en ese nivel de atención durante toda la novela. Y sí, lo consigue. Me resultó una lectura adictiva, no quería parar ni un momento. Lectura muy recomendable.



Enzo desde Liberty Café